La georreferenciación es la técnica de asignación de coordenadas geográficas a un objeto, que se utiliza en los procedimientos de cartografía informatizada y en la elaboración de bases de datos cartográficas digitales. Mediante la georreferenciación, se ubica de forma precisa la posición de un determinado punto en la superficie de la Tierra.
Los datos georreferenciados permiten superponer capas de información y elegir la que necesita el usuario. El software SIG permite combinar información de diferentes sistemas de coordenadas para aportar una ubicación precisa. Esta característica implica que de una misma base de datos georreferenciados se adapta para el uso que necesitan diferentes usuarios mediante la configuración de los datos que debe ofrecer el mapa.
Ventajas de los datos georreferenciados en la cartografía
En cartografía, a diferencia de los mapas de pequeñas extensiones, debe tenerse en cuenta la curvatura terrestre. Las coordenadas proyectadas de la cartografía se basan en un sistema de proyecciones en mapas que representa la superficie curva de la tierra en un plano bidimensional.
A la hora de elaborar un mapa, siempre existe una distorsión ligada al tipo de proyección elegida (ángulos, áreas o distancias). La solución a las distorsiones consiste en la elaboración de mapas específicos para el uso que vayan a tener, tanto en escala, como en tipo de proyección. Se busca que, en la proyección elegida, los factores que más interesen sean los de las medidas más fieles.
La ventaja de las bases de datos SIG consiste en que el software es capaz de integrar la información de diferentes sistemas de coordenadas para aportar fidelidad en las mediciones. Cada usuario puede elegir el tipo de proyección que le convenga a su proyecto, y el SIG gestiona los datos de cada sistema para ofrecer el mapa a medida.
En un gran proyecto de obra pública, por ejemplo, a determinado ingeniero no le interesará la información altimétrica para ejecutar su parte del trabajo, pero sí la planimetría, y a la vez a otro ingeniero la información altimétrica le resulta imprescindible. En paralelo, un funcionario municipal necesita un mapa de la misma zona con el censo de árboles, las especies y la edad, para medir el impacto ecológico de la obra.
Además de los dibujos vectoriales, también se puede georreferenciar una imagen. Se puede crear un mapa georreferenciado a partir de mapas de papel, ortofotos aéreas, e incluso extraer una imagen desde un archivo PDF. El trabajo con imágenes, sin embargo, no es sencillo y se debe confiar en un software GIS que ofrezca algoritmos capaces de transformar un archivo de imagen simple en la información de la imagen + posición.
La georreferenciación es una herramienta que, gracias a la potencia de aplicaciones SIG, ha traspasado el uso profesional. Las aplicaciones basadas en el SIG, crecen en variedad, y abarcan el ocio y la cultura, entre otros sectores. Gracias a la usabilidad del sistema, un usuario sin preparación técnica puede configurar una visita virtual en un recorrido turístico, o planear rutas en sus viajes desde un dispositivo móvil.